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Esta receta de manzanas cocidas requiere solo tres ingredientes clave: manzanas, azúcar en polvo y agua.
Las manzanas guisadas son simplemente manzanas que se han ablandado en agua hirviendo con azúcar en polvo. Las manzanas guisadas cubiertas con avena o con un aderezo desmenuzado son un postre delicioso, pero también se pueden usar en muchos otros platos. Puede dejar que se enfríen y agregarlas a las gachas o al yogur, como adorno para el desayuno, por ejemplo. Hemos mantenido esta receta muy simple, pero para darle más sabor, agregue una pizca de canela. Para un mayor dulzor, cambie el agua por jugo de manzana.
Ingredientes
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500 g de manzanas, cortadas en cuartos, sin corazón y peladas
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50 g de azúcar en polvo
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1 cucharada de agua
Método
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Cortar las manzanas en rodajas y colocarlas en una cacerola mediana con el azúcar y el agua. Tapar la sartén y ponerla en la encimera a fuego medio. Cuando llegue a ebullición, poner el temporizador durante 5 minutos y dejar cocer.
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Revuelva después de unos 4 minutos, las rodajas de manzana comenzarán a disolverse y volverse esponjosas. Cocine durante 1-2 minutos más o hasta que la manzana esté esponjosa pero aún se vean algunos trozos. Pruebe la mezcla, agregando más azúcar si es necesario.
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Deje enfriar, luego vierta en un tazón y refrigere por hasta 1 semana.
El mejor consejo para hacer manzanas guisadas
Agregue un par de dientes enteros en el paso uno, ¡pero recuerde quitarlos antes de servir!
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